La OMS lo ha declarado como emergencia mundial para la salud pública a finales de enero de 2020.
Los coronavirus de Wuhan forman parte de un gran grupo de virus que son frecuentes entre animales como los murciélagos, y que pueden pasar a los seres humanos que estén contacto con ellos.
A partir de esa infección humana los virus propagan de persona a persona a través de gotitas respiratorias al toser o estornudar.
El coronavirus de Wuhan puede causar fiebre, tos y dificultad para respirar, y en algunas personas puede extenderse al tracto respiratorio inferior, causando neumonía e incluso la muerte.
El diagnóstico se hace en pacientes que han padecido fiebre o síntomas de infección del aparato respiratorio y que residen o han visitado Wuhan (China) los 14 días anteriores a la aparición de los síntomas o han tenido un contacto directo los 14 días anteriores con un caso confirmado en el laboratorio.
La confirmación de laboratorio se hace por PCR.
En este vídeo en directo que publiqué en YouTube explico el tema.